Esta voz nombra a Upupa epops, única representante de este género en el mundo. Destaca
por ser ave llamativa de color rosado, con un diseño ajedrezado en alas y cola,
y con una cresta, también es célebre por el olor que despenden sus nidos, que
les ha dado fama de sucias.
Los ejemplos que
hemos encontrado sobre definiciones en la documentación antigua forman parte de
distintos vocabularios, y aparte de dar una definición o correspondencia más o
menos formal, algunos dan otros datos que encajan en alguno temas que
trataremos más abajo.
Alfonso de
Palencia (1490) hace referencia a la especie en su Universal Vocabulario en Latín y en Romance:
Opopon, en griego: por vpupa en latin: que
es habubilla aue muy suzia avn que
pareçe en el plumaie fermosa.
En Nebrija en 1495:
Abubilla. ave upup-ae epop-opis.
Pocos años después (1499) es
Rodrigo Fernández de Santaella quien la cita, ampliando su definición, con
datos de su biología y costumbres, en el Vocabulario
eclesiástico:
Vpupa.
pe. femenino genero me. cor. es aue que segund sus señales paresce ser la que
llaman habubilla. Leuitici .xj. come
hez o hienda humana y muchas vezes come y se mantiene de estiercol. Es aue muy
suzia. tiene cresta de pluma. quasi semejante ala cogujada. esta en el estiercol o enlos sepulcros. Dizen que si
alguno se vnta con su sangre: y duerme siente en sueño que lo quieren ahogar
los demonios. vsan de su coraçon los hechizeros para sus maleficios. Dizen
tanbien que desque es vieja y ni puede ver ni bolar sus fijos le sacan las
plumas E pelada la vntan con çumo de ciertas yeruas y la abrigan con sus alas
fasta que le nasce pluma tanto que viene abolar y ver como ellos segun que dize
nuestro isidoro.
Varios ejemplos
vistos hasta ahora usan la voz Habubilla,
pero parece ser que la voz Abubilla se impuso a otras formas, por lo menos dentro
de los círculos académicos. Así lo atestigua el Bocabulario del Umanista de Palmireno (1569), los vocabularios
posteriores ya la usan bajo esta forma:
Upupa, la Putput, la Abubilla
Dentro del grupo
de referencias también podemos contemplar el refrán procedente de Refranes y proverbios en romance (Núñez,
1549):
Quando canta la habubilla, dexa el buey y toma la gavilla.
Los escritos que
ahondan en los detalles de la biología de la especie abunda, el primer ejemplo
(y primera referencia a esta especie con este nombre) lo hallamos ya en el siglo
XIII en El Libro de los animales que
cazan de Muhamed Ibn Abdallah:
E dezimos assí, que son éstas: los corveznos chicos que an los pechos
blancos e las habubiellas e las lechuzas e unas aves que an la color
picaraçada de vermejo e de verde e dízenles en arávigo xitraquete. E de las aves del agua, unas aves blancas que andan en
las marinas e dízenles en arávigo jamilas,
e unas aves pequen[n]as que andan en los ríos que les dizen cigonnuelas.
La
siguiente referencia nos la da Pero López Ayala (1385), donde aparece bajo otra
de las formas más comunes, y que aun se conservan como ornitónimo en varios
lugares (Achutegui et al., 1982):
[Los Alcotanes] También
buelan la bubilla
Fray Vicente de
Burgos en su traducción de El Libro de
Propietatibus Rerum de Bartolomé Anglicus (1494), nos habla largo y tendido
de la especie:
[]segund cuenta Costantino, que la sangre
del cabo del ala diestra de la paloma,
o de la golondrina, o de la abubilla, puesta caliente sobre la tela
del ojo, la sana si es nueva, ca la sangre destas aves es muy ardiente &
muy deguastante por la natura de las aves do viene. []
La
abubilla, segund Isidro en griego ha
el mesmo nombre porque come el estiercol de los ombres & es criada de
suçiedades. Esta ave es muy suzia & ha en la cabeça cresta que le esta como
un yelmo. Por la mayor parte mora entre las suziedades & en los sepulcros.
Si una persona se unta de su sangre quando va dormir pareçerle a ver los
diabolos dormiendo que le quieren afogar su coraçon. Vale a muchos experimentos
& del usan los encantadores en muchas maliçias. Desta ave dizen los
filosophos que quando es tan vieja que no vey & que no puede volar sus
hijos le harrancan las plumas gruesas que nada le valen & le untan los ojos
del sugo de algunas yervas mediçinables & debaxo de sus alas la crian fasta
tanto que sus plumas son renovadas & que vey claramente & puede volar
como las otras aves. []
[Los
huevos] Estos pareçen a los de la pardiz
pero son mas pequeños y mas feos de ver y de peor gusto, de mas fuerte olor,
los pone en el estiercol y en la suziedad, son buenos para hazer encantaçion y
malefiçios segund dize Plinio
El Cancionero de Juan Fernández de Ixar
(finales del siglo XV) nos narra un hipotético comportamiento misericorde de la
especie:
puedese aconparar la virtud de la
missericordia a los fijos de vna aue, que ha nonbre habubilla, los quales quando veen
envejeçer su padre e su madre, asy que por vejedat han perdido su poder,
fazenles vn nido, e aquellos los paçen asy como si fuesen pollos, e plumanles
todas las plumas, e despues les quiebran los ojos, e asi los tienen dentro en
el nido fasta tanto que por natura les nasçen las plumas e cobran la vista, e
por aquesta via renueuan
Ya mediados del
siglo XVI, el cetrero Juan Vallés, nos dice:
[El esmerejon] especialmente matan muy bien copada,
y cugujada y perdiz, y abubilla, y cluquillo, y tordos
No
obstante, unas Loas anónimas de 1616
dicen (también lo dice el autor anterior
El esmerejón, que trepa
la región del aire vana,
á la abubilla
atropella,
y ella dél huye y se aparta.
Tenemos otra
referencia, en el magnífico Libro de
cetrería de Luis de Zapata (1583), escrito en verso:
lo que matan es esto (ya estos buelos
no valen los torçuelos un comino)
cugujada estornino tortolilla
tordo charla abuuilla y tambien toma
esmerejon paloma, en Cataluña
me dezian que a la vña
las auia.
Jerónimo de Virues
(1592), habla de las plantas que usa la Abubilla y otras especies para alejar a
los parásitos del nido:
les dio el mesmo
natural instincto a muchas aves para defenderse con yervas y remedios de los
gusanos y animales venenosos en sus nidos, como a las golondrinas con el apio;
los halcones con la lechuga sylvestre; los cuervos con el agno casto o con la
dragontina menor; la abubilla con el culantrillo de poso
Ya vimos algunas referencias a propiedades
médico-religiosas como el uso del corazón o los huevos para embrujos y
maleficios, pero encontramos varios ejemplos más que usan diferentes partes del
cuerpo y residuos de las Abubillas para curar diversos males. Así para agudizar
el entendimiento (Villana, 1423):
Afuera
d'estas cosas dichas que se comen por vianda e mantenimiento e plazer de sus
sabores, se comen otras por melezina; así como la carne del omne para las
quebrantaduras de los huesos e la carne del perro para calçar los dientes, la
carne del tasugo viejo por quitar el espanto e temor del coraçón, la carne del milano
para quitar la sarna, la carne de la habubilla
para aguzar el entendimiento, la carne del cavallo para fazer omne esforçado,
la carne del león para ser temido, la carne de la enzebra para quitar pereza.
Para curar el aojamiento (Villena, 1422):
Otros lo sahumavan con
yerva tur e con aristología redonda e aun ruda con péñolas de habubilla e de lechuza.
Alfonso
Chirino (1429) en su Menor daño de la
medicina recomienda para los males de renales:
E
esto es tan bien para menuzar la piedra & para orjnar mucho para el que se
le detiene la orjna & para
sacar el arena dela vexiga & Riñones Dizen para esto que la lengoa d ela habubilla secada
et molida & beujda quu tira
la olujdança & trae Reminiçençia.
Hallamos una referencia más a
las siniestras propiedades del corazón en Pedro Mejía (1540-50):
del coraçón de la habubilla,
que huyen las hormigas dél, no de su cabeça ni pies
Francisco Santos (1665) va más
allá aun:
La
hormiga huye de la abubilla en tanta manera que muere si a ella llega
En el siguiente ejemplo la vemos
en un listado de ingredientes para pócimas y conjuros (Balbuena, 1624):
Yerba del pito contra el hierro duro,
Ceniza de hombre muerto de algun rayo;
Estéril tierra de sepulcro oscuro;
Dos huesos de abubilla
y papagayo;
Yedra cortada de arruinado muro;
Ruda encantada con rocío de mayo;
Pares de un abortivo, y la testera
De unicornio, habaela y de pantera.[]
Ni la que en su celebro la abubilla
A entender da los sueños aplicada;
Con esto último, tenemos que nombrar
una piedra de cualidades maravillosas, que se halla en los nidos de Abubilla
(de Burgos, 1494):
[La]Querina dize Diascoro que es una piedra
hallada dentro del nido de la habubilla.
Esta piedra revela & descubre los secretos, ca puesta so la cabeça de una
persona que duerme dize claro lo que sueña. Esta piedra multiplica las
fantasias y es muy amada de los encantadores, ca por ella hazen maravillas.
Como hemos visto, la Abubilla no estaba muy
bien vista debido a su olor y a ser ave
suzia, de ahí que en algunas de las historias que hemos encontrado se lleve
la peor parte.
Quizá uno de los documentos más curiosos es
el que aparece en el Libro de los Gatos (ya
lo hemos visto hace tiempo en este blog). Texto del siglo XIV, tiene carácter
moralizador a través de fábulas protagonizadas, en muchas ocasiones, por
animales, y que en caso que nos ocupa se vale de la creencia de que,
dado el mal olor de sus nidos, es un ave sucia.
XLII.
Enxemplo de la abobilla con el ruyseñor.
La abobilla,
que es pintada de muchos colores é mui bien crestada, dijo al ruyseñor: "Amigo, toda la noche
andas cantando é saltando por los árboles, é nunca quedas: ven conmigo é
folgarás un poco en mi nido." E él otorgógelo é descendió al nido del abobilla; mas tanto olia de mal por el
estiércol que era hi, que non lo pudo endurar, é fuése su camino diciendo:
"mas quiero por los árboles duros saltar toda la noche que non morar en
tal lugar." El abobilla que
face el nido en el estiércol, significa la mala mujer é los hommes lujuriosos,
que algunas vegadas han lechos é puestos blandos, mas hiédenles muy mal por el
pecado. El ruyseñor que anda por las
ramas se entiende por los hombres ó por las mujeres que viven en los ásperos
mandamientos de religión, é orando á Dios en las horas de la noche, loando é
bendiciendo el su nombre. Aquestos tales mas cobdician estar en tales árboles é
cantar, que non parescer en el nido del estiércol del pecado.
No obstante, también es la encarnación
de un rey castigado, así lo cuenta el mito de Thereo en su versión latina. Hemos
hallado más de treinta referencias a este mito para el periodo aquí tratado. Una
primera mención es la de Pero Díaz Toledo (1447):
Por lo cual dizen los
poetas que todos fueron covertidos en ave: Filomena en ruiseñor, e Progne en golondrina,
e Thereo en habubilla, e el fijo en faisan.
En el Arte de la caça de altanería Diogo Fernandes
Ferreira (1625), también nos nos da una referencia poética cuando nos habla de
la
Tereo, biendo el casso, dio con la messa en tierra y metió mano a la
espada; ellas huyeron, Progne convertida en golondrina y Filomena en ruiseñor,
Itis en faissán, Tereo en habubilla.
...y de la habubilla, por la
significación de la corona en la cabeça y en la hermosura de las plumas
pintadas de que se viste finge ser el rey, porque la habubilla tomada en la mano tiene mal olor, y el nido della lo
mismo, con que se da a entender que los malos hechos, aunque los cometan reyes
y personas graves se a de huir dellos, y volverles la cara, como a cossa
abominable y hedionda.